Me sorprendió con su yupi gigante ¡¡¡
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Confesiones Manzana Erótika:
PERO... hay un pequeño GRAN detalle muy evidente que me pareció llamativo y gracioso, seguro lo van a notar 😂
Esto pasó hace mucho tiempo en la ciudad. Fue la aventura más diversa y grandiosa que he tenido hasta el momento.
Sucedió que conocí a un hombre de aproximadamente 1.93 metros. Yo mido 1.65, así que apenas le llegaba a los hombros. Era un hombre caballeroso, con una sonrisa encantadora, y su aroma era cautivador. Tenía un cuerpo atlético, brazos fuertes y grandes músculos. Su tez era morena clara, y su físico en general resultaba un poco intimidante.
El caso es que habíamos quedado en salir, así que fuimos a un motel cerca del lugar donde nos habíamos encontrado. Entramos a la habitación, y yo estaba muy nerviosa. Él se acercó, tomó mis manos y me dio un tierno y largo beso. Poco a poco me fui tranquilizando.
Era un experto en la materia. Me fue quitando la ropa mientras besaba mi cuerpo hasta llegar a mi chochita, la cual besó, mordió y saboreó con gran placer. Yo estaba tan ansiosa de probarlo que llegó mi turno. No podía creer lo que mis ojos estaban viendo. No me hice esperar más, así que comencé a chupar su enorme y grueso pene, que apenas entraba en mi boca. Fue un gran manjar saborear ese néctar que me estaba regalando.
Le gustaba tener el control de la situación. Me tomó de la cintura, me puso en cuatro, tomó su enorme pene y lo colocó sobre mi vagina. Lo fue metiendo poco a poco. Al principio sentí que me partía en dos; Fue muy doloroso, pero mi cosita se fue adaptando a su tremenda verga. Empezó con un ritmo lento que fue aumentando hasta volverse bestial. Mi vaginita sangró unas gotitas, y por unos minutos no pude moverme mucho, pero el dolor se convirtió en placer.
Sus embestidas me hacían sentir que tocaba el cielo. No podía creer lo que estaba sintiendo y no quería que terminara. Me hizo gemir como nunca antes. Cuando ya no aguantaba más, le pedí que terminara, pero él quiso cambiar de posición.
Me hizo montarlo. Aunque sabía que me dolería, lo hice. Me acomodé sobre su pene, y sentí cómo me llenaba completamente. En esa posición el dolor era más intenso, pero él me tomaba de la cintura y me ensartaba con fuerza. Yo gritaba que ya no aguantaba más. Terminamos juntos, con un gran y enorme orgasmo.
Descansamos un rato, pero él sugirió probar algo nuevo: hacerlo anal. Aunque sabía que dolería, acepté porque quería experimentar. Se echó un poco de crema y comenzó despacio, metiendo solo la puntita. Me dolía, pero la excitación del momento era tanta que seguía adelante.
Poco a poco, lo fue metiendo más. Pasó de ser suave a más intenso. Era tanta la emoción que me vine varias veces. Le pedí que fuera más duro, y él me agarró fuerte del pelo y me clavó como un animal. En ese momento, ambos nos dejamos llevar hasta que alcanzamos un clímax explosivo.
Fue una de las experiencias más deliciosas que he tenido. Si pudiera, la repetiría sin pensarlo.
8 comentarios
Que rica experiencia me puedes enviar el contacto de dayanita gracias
Que delicia vivir una experiencia asi.
Ufff que rico 🤤, esa es mi fantasía, mi marido me lo hace una vez en 10 días y yo mantengo caliente, imaginarme que está fantasía se me haga realidad… Me moja hasta el alma, que rico algo así con un pene, duro, venoso y grueso .
👍🏻quedamos pocos
Q experiencia